jueves, 30 de octubre de 2008

Los desastres no son naturales

Los desastres no son naturales, del blog Desde el Ombligo del Mundo

“Los desastres no son naturales”, es el título de un conocido libro en el mundo cercano a la reducción de riesgos de desastres.

Además del título de un libro es buen titular para hacernos ver que la naturaleza no es la culpable de desastres los cuales parece que en los últimos años se intensifican.

Debido al cambio climático, los patrones meteorológicos parecen modificarse y algunos fenómenos naturales están produciendo efectos devastadores.

Dichos fenómenos no son nuevos, han existido desde siempre, incluso antes de que tuviéramos conciencia. Sin embargo, la organización de nuestras sociedades y territorios está produciendo que nos expongamos de manera muy vulnerable a estas amenazas.



Ecuador, es un país claramente amenazado por gran parte de los fenómenos naturales los cuales podamos imaginarnos: volcanes (la cordillera de los Andes se le llama vulgarmente “el cinturón de fuego”), terremotos (está situado ubicado en una zona de gran riesgo sísmico), inundaciones (debido al fenómeno del niño y las corrientes del pacífico), sequías, deslizamientos de tierra, tsunamis, etc.

Leyendo esta secuencia real de amenazas naturales podríamos decir que Ecuador debería ser un país inhabitable. Evidentemente no.

La clave radica, entre otras cosas, en la percepción de la comunidad a las amenazas presentes. Desgraciadamente, debido en la mayoría de las ocasiones a la pobreza las preocupaciones de la gente se centran en la supervencia diaria sin preocuparse por sus altas condiciones de vulnerabiulidad.

Algunos factores agravantes que provocan que los impactos de los fenómenos naturales se conviertan en desastres son los sigientes:

  • La mala coordinación entre las instituciones gubernamentales tanto en socorro como principalmente en la gestión de riesgos.

  • Poca planificación urbanística: Latino-américa se está urbanizando a pasos agigantados. Mucha población rural emigra a las ciudades a pesar de tener pocas posibilidades laborales. La población aumenta rápidamente. Sin embargo, a pesar de ello no existe una planificación urbanística adecuada.

  • Construcciones ilícitas e inapropiadas: Se producen asentamientos de gente con pocos recursos formando barrios en las laderas de mayor pendiente (en la sierra) o en las zonas periferico-marginales de depresión altamente inundables (en la costa). Esto es debido al bajo precio de compra de estos terrenos o a que estos terrenos son gratis pero ilegales y a la poca autoridad municipal para prohibir la construcción en estas zonas de riesgo. A esto habría que unirle que en muchas ocasiones son las propias familias las que se construyen sus hogares, con materiales de baja calidad y sin ningún diseño sísmico. Todo ello evidentemente provocado por la fragilidad socio-económica y la falta de educación y consciencia de su vulnerabilidad. Todos estas cosntrucciones ilícitas forman asentamiento ilegales los cuales no disponen de servicios municipales como alcantarillado, servicio de agua, etc.

  • Basura: Una brutalidad de toneladas de basura se depositan en parcelas vacías o barrancos afectando al sistema de drenaje natural, bloqueando el acceso de las aguas residuales al alcantarillado, o acabando en ríos donde contamina y produce taponamientos de las aguas que modifica el cauce del río.

  • Deforestación: En muchas ocasiones las empresas madereras en otras la necesidad de tierra para construir provoca una degradación ambiental que aumenta la vulnerabilidad a deslizamientos de tierra e inundaciones.

Podríamos citar sin duda más circunstancias.

Entre otros proyectos, me encuentro como parte del equipo de trabajo del PNUD intentando reducir el primero de los factores citados. Estamos desarrollando planes de contingencia para varios de los municipios de la costa los cuales tiene mayor riesgo de inundación. En febrero, Marzo seguramente lleguen las primeras lluvias. Veremos si hemos contribuido verdaderamente a reducir su vulnerabilidad.

domingo, 5 de octubre de 2008

Historias comunes entre las sombras

Historias comunes entre las sombras, del blog Desde el Ombligo del Mundo

Una de las agencias de las Naciones Unidas llamada UNIFEM, encargada de temas de género, está realizando una campaña de recogida de firmas en contra de la violencia a través de la plataforma Web www.dinoalaviolencia.org. Entre las actividades realizadas en Ecuador ha proyectado durante una semana en uno de los cines más conocidos de la ciudad, una serie de películas relacionadas con esta temática de “No a la Violencia” (en términos de género).


Una de las películas proyectadas ha sido “4 meses 3 semanas 2 días”. Estupendo filme rumano de Cristian Mungui que ganó la palma de Oro y que trata la historia de una joven estudiante rumana durante la dictadura comunista de Nicolae Ceausescu. Durante la película se trata el caso común de una joven que aborta de manera clandestina. En el año 1987 en Rumania el aborto es ilegal y se practicaba en una exagerada cantidad. Al tener que realizarse de manera ilegal las jóvenes se veían extorsionadas y su vida corría siempre peligro. Los antecedentes corren por 1966, cuando el aborto fue prohibido por el dictador Ceasescu y desde ese año hasta 1990 se produjeron en Rumania 500000 muertes de mujeres por complicaciones inherentes al procedimiento de aborto. Podríamos decir que casi un genocidio.

El tema del aborto está de actualidad en Ecuador debido a que con motivo de la votación de la Nueva constitución ha sido un argumento de la Iglesia para votar en contra. En Ecuador el aborto está prohibido. Es ilegal. Y en la nueva constitución, aún manteniendo esa ilegalidad algunos ven cierta ambigüedad en el texto.

Datos oficiales que he leído en Internet dicen que en Ecuador se producen 30000 abortos al año, aunque extraoficialmente se habla de muchos más. Teniendo en cuenta que la población ecuatoriana es de 13 millones, me quedé perplejo cuando leí esa cifra. Debido a la ilegalidad del mismo, el aborto se realiza en clínicas clandestinas y en otras muchas ocasiones se autoinduce. Pastillas que perforan el útero, sondas que cruzan el útero, sustancias tóxicas en el interior de la vagina, golpeos fuertes sobre el estómago de la madre… Estas son algunas de las técnicas utilizadas que suponen un gran riesgo para la vida de estas mujeres.

El precio de abortos inducidos en países en que el aborto es ilegal es sumamente elevado, los servicios son de mucha peor calidad, y la búsqueda del aborto es difícil, angustiosa, y excesivamente arriesgada, además de que si es descubierto, el castigo social y legal por abortar puede ser muy duro.

Esta película me pareció magnífica y sin entrar sobre el debate de estar a favor o en contra del aborto, trata de reflexionar sobre este tipo de violencia en el que la mujer no es libre para tomar una decisión y debe poner en peligro su vida. La legalización del aborto permite reducir los riesgos creados al deber abortar en condiciones muy peligrosas debido a su ilegalidad. También, algunos opinan que "al ser libre de tomar la decisión de manera legal la mujer (y el hombre) pueden decidir con más calma, sopesar con claridad y objetividad, y llegar a una conclusión con la que se responsabilizan."

En Latinoamérica y el Caribe, según la OMS, hay más de un aborto inseguro por cada 3 nacidos vivos y el 13% de las muertes relacionadas con el embarazo han sido atribuidas a las complicaciones de abortos inseguros.

Aunque la legalización reduce algunos riesgos la solución no esa, sino que radica indudablemente en una educación sexual adecuada desde la niñez que permita recudir los casos de embarazos no deseados. En muchos lugares no se consigue debido a la pobreza y a la escasez de posibilidades de obtener una buena educación. Pobreza y educación están íntimamente relacionados


Recomiendo ver esta película que nos narra de manera humana una historia diaria y común que vive escondida entre las sombras.